miércoles, 22 de mayo de 2013

MI CRÍTICA: AMERICAN GANGSTER


 Yo, que desde siempre me he declarado un fan incondicional de DENZEL WASHINGTON, debo confesar que esta película me ha sorprendido por muchas razones y no todas buenas. Me explico (atención, voy a hablar de la cinta, si no la ha visto alguien no sigas leyendo):
El primer cuarto de película me resultó curiosa. Se centra en mostrarnos los dos lados de un gangster, de un capo. Una parte humana, como cuando reparte comida entre los habitantes de Harlem, y otra brutal y sanguinaria.
Al principio WASHINGTON no tiene mucho protagonismo, debido a que el enfoque se centra en su mentor y en el propio RUSELL CROWE, el policía que persigue a los mafiosos, pero poco a poco WASHINGTON va tomando el control de las calles y el imperio que dejó su mentor y se convierte en un clon de él.
Un buen detalle es como se muestra al actor siguiendo los consejos de su mentor a modo de flashbacks, imitando sus acciones, como por ejemplo no salir nunca ni relacionarse con otros mafiosos, no ser ostentoso ni llamar la atención, factor determinante para que le investiguen avanzada la película (con esto me refiero al genial momento del abrigo).
La cinta se va enroscando en una trama del cuerpo especial de CROWE para desmantelar la red que distribuye una droga importada por el ejercito americano desde Vietnam hasta Harlem sin intermediarios. Se hace famosa porque al traerla WASHINGTON desde Vietnam es más pura pero también más barata y así el capo va quedandose con el control de todos los barrios. Consigue que toda su familia se mude y le ayude, hermanos y primos, a controlar los barrios (ya sabemos por otras películas lo importante que es la familia para la mafia), se casa y hasta tiene enredos con policías corruptos que se suponen deberían atraparlo.
Hasta aquí muy bien, pero en mi opinión, la cinta va liándose tanto que al final da la sensación (si no fuese porque es una historia real, o al menos basada), que ni el director sabe como terminarla en condiciones.
Y es curioso ya que el director no es otro que RIDLEY SCOTT, y este no esta considerado precisamente un mal director. No me entendáis mal, la película me pareció buena, pero no me gustaron los últimos 20 minutos, me quede con un mal sabor de boca. No es creíble, aunque pasara, que un capo sanguinario como WASHINGTON, termine de ese modo. No es un justo final para su personaje ni para el de CROWE.
Así que mi valoración es que visualmente es una cinta potente, con una trama bien elaborada a pesar de su ramaje, que sigue bien las pautas y los giros, que nos muestra muy bien la mafia de principios de los 60 pero que se va diluyendo cuando se acerca el final. Un final atropellado y sin mucho sentido, con un WASHINGTON sumiso y un CROWE a lo poli bueno-poli malo que no le pega al final.
Gran trabajo (como siempre de WASHINGTON) y gran trabajo (también como siempre) de CROWE, pero que antes de verla me hacía esperar un final más apoteósico.


Esto no tiene, de ninguna manera, que impedirle a nadie el visionado, es solo mi opinión y me consta que a muchos si les gustó el final. Solo queda decir que si la habéis visto o lo hacéis, estaré encantado de leer vuestros comentarios.

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